El bitcoin está apareciendo tímidamente como alternativa al modo de compraventa habitual del sector inmobiliario, pero cada vez va afianzándose más, y todo apunta a que va a continuar esta tendencia.
Ya podemos ver algunos anuncios que aceptan bitcoins como medio de pago en algunos de los portales más conocidos de compraventa de inmuebles, y no es de extrañar, ya que aportan algunas ventajas muy atractivas, aunque hay que tener en cuenta que estas transacciones también suponen algunos riesgos. Aun así, su ascenso parece imparable.
Operando con bitcoins
Antes de nada, aclararemos que el bitcoin es una criptomoneda, y que cómo tal, no está sujeta a ningún sistema bancario, y que se sustenta sobre tecnología blockchain, con un concepto básico fácil de entender, el libro de contabilidad distribuido (sin entrar en tecnicismos).
Con el fin de despejar dudas, diremos que el pago con bitcoins es totalmente lícito, y que, a la hora de fijar el precio de una vivienda, basta con indicar el precio en euros y en bitcoins, lo que queda reflejado en las escrituras por parte del notario.
Hay que señalar que, para evitar fraudes, es necesario demostrar la procedencia de la criptomoneda, lo cual, en caso de hacerse en a través de puede entidades financieras, puede demorar el proceso. Por eso recomendamos aportar el modelo 720 de hacienda, a modo de acreditación de los bitcoins.
El uso de bitcoins presenta una serie de ventajas indiscutibles, como:
- Es posible traspasarlos de una cuenta a otra sin pasar por euros.
- Las transacciones pueden llevarse a cabo más rápidamente que con los sistemas habituales, especialmente entre particulares.
- Gracias al Blockchain, las transacciones son seguras y se ponen en funcionamiento mecanismos contra el fraude.
- Se evitan muchos de los intermediarios a la hora de realizar las transacciones, así como comisiones bancarias.
Sin embargo, como en cualquier operación de este tipo, conviene ser cuidadosos ya que, por ejemplo, una vez realizada una transferencia en bitcoins, no es posible recuperarla sin la figura de un intermediario que asegure el proceso. Es conveniente contar con asesoramiento especializado, antes de empezar a operar con bitcoins sin experiencia previa, o tener un cierto grado de conocimiento de ellas.
Avanzando hacia un nuevo sistema de compraventa
Es lógico pensar que las criptomonedas han llegado para quedarse en el mundo inmobiliario, y más teniendo en cuenta la creciente digitalización del sector. Aunque estamos en un momento temprano (la primera compra de una vivienda en criptomonedas se realizó en Tarragona en 2018) y a pesar de que el bitcoin presente su volatilidad característica, no hay duda de que está en pleno proceso de establecimiento entre el público general, lo que será más rápido cuanta más confianza logre generar entre los usuarios.
A este respecto, existen las “stablecoins”, un tipo de criptomoneda menos volátil que el bitcoin, lo que puede suponer una vía más rápida de la adopción de criptomonedas, especialmente si hablamos de compraventa de viviendas.